Oportunidad y Resiliencia: las claves de los empresarios mexicanos
La resiliencia es la capacidad que tenemos los mexicanos, especialmente los empresarios y emprendedores, de adaptarse ante situaciones adversas.
Por Héctor X. Ramírez Pérez*
Como cada arranque de año, es un buen momento para preguntarnos lo que podemos esperar para este 2025. Tenemos nuevo gobierno en México que encabezará un hecho inédito: una reforma judicial mal vista a nivel internacional que refleja incertidumbre hacia el estado de derecho nacional.
Se prepara un paquete económico con déficit de 3.9% del PIB; se prevén finanzas públicas endebles en caso de que no se cumpla la expectativa de crecimiento económico que está entre el 2 y 3% anual, lo que requiere que el gasto del gobierno, uno de los principales promotores de la economía, deba ser cauteloso (incluso los analistas creen que ese porcentaje es muy optimista).
Pemex, una de las principales instituciones gubernamentales, está con serios problemas de deuda de mercado y créditos bancarios; además, será un año de tensiones ante la revisión del T-MEC. Según Transparencia Internacional, México estará debajo del lugar 120 entre 180 países en el índice de percepción de corrupción, cuando nuestros vecinos de Norteamérica están en el lugar 12 (Canadá) y 24 (EUA); y de acuerdo con el INEGI, durante 2024 más del 60% de la población consideró la inseguridad como el problema más grave del país.
Por si todo lo anterior fuera poco, comenzará un segundo periodo presidencial de Donald Trump que, como hace ordinariamente, lanza mensajes negativos hacia nuestro país.
Parecería que la recomendación sería: cautela total, el más bajo perfil posible y poner todos los medios para tratar de al menos sobrevivir. ¿Opciones para huir del país? ¡Tómelas! Sin embargo, luego recordé que todo lo descrito anteriormente, con excepción de la Reforma Judicial, no es algo ajeno a una realidad nacional de varios años y, aun así, el país sigue adelante con crecimiento en muchos sectores empresariales.
¡Cierto! Es lamentable tener hechos tan poco alentadores, niveles altos de corrupción y un estado de derecho poco presumible, pero nuevamente recordé que esta no es una revista de economía ni de política, sino de dirección y dirigida a empresarios quienes justamente en los problemas encuentran oportunidades. Hay un elemento muy mexicano a tomar en cuenta que es claramente nuestra ventaja competitiva: la resiliencia, esa capacidad que tienen los mexicanos en general, especialmente los empresarios y emprendedores de todos los tamaños, de adaptarse ante situaciones adversas.
¿Estado de derecho malo y alta incertidumbre de país? Sí, en efecto, pero el nivel de inversión extranjera directa ha tenido una tendencia al alza en los últimos 10 años (con excepción del 2020 durante la pandemia). ¿Un nuevo presidente estadounidense poco afín a México? También es cierto, pero si a alguien quiere menos es a China, país con quien llevamos años compitiendo por el primer lugar en exportaciones hacia la economía más importante del planeta. Es decir, la fórmula se mantiene: conviene tener una visión magnánima combinada con una dosis de optimismo y de prudencia. Para los audaces, siempre habrá más oportunidades que obstáculos.
Soy parte de una universidad privada. Recientemente impartí un curso a directivos de instituciones educativas privadas también. En la discusión de un caso en temas de salud, un participante argumentó que no era correcto que el sector privado estuviera resolviendo más el tema de las medicinas a nivel nacional que el sector público, aduciendo a que el gobierno no estaba haciendo su trabajo como sí lo hacían gobiernos en otros países. Sin que yo tuviera todos los datos a la mano para apoyar o refutar su aseveración, preferí plantearle un nuevo paradigma siguiendo el mismo hilo de su argumento: ¿qué pasaría si, verdaderamente, el gobierno “cumpliera” totalmente su trabajo en materia de salud y educación (lo que para él significaba que ningún ciudadano pagáramos por estos servicios más allá de nuestros impuestos)? ¿Resultado? Muy probablemente ni la institución de esta persona, ni la que yo represento, ni ninguna de los que estaban en el curso existiría, ya que no habría necesidad de nuestros servicios. Dos conclusiones: (1) en las carencias surgen las oportunidades y (2) seamos cautelosos con lo que deseamos.
¡Les deseo a todos un feliz y próspero año 2025!
Héctor X. Ramírez vicerrector de la Universidad Panamericana, Campus México.
Nota del editor: Este texto pertenece a nuestra sección de Opinión y refleja únicamente la visión del autor, no necesariamente el punto de vista de Alto Nivel.
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