GM y NASA se unen en un robot
Conoce a 'Robonaut 2', un autómata diseñado para mejorar la seguridad de los vehículos y el trabajo en las fábricas.
A pesar de que la robótica todavía no ha experimentado un boom comercial, ni está cerca de desarrollarlo, cuando esto suceda estaremos frente a uno de los mayores hitos en la historia de la ciencia, por lo que muchas compañías ya hacen esfuerzos para formar parte de esto.
General Motors (GM) es una de ellas. Como parte de un plan para acercarse a los avances logrados por algunos rivales de la industria japonesa como Honda y Toyota, la compañía estadounidense diseñó un robot denominado “Robonaut 2” (R2) que busca mejorar la eficiencia y la seguridad, en la fabricación automotriz.
Pero el plan va mucho más allá. Según GM, R2 será enviado a la Estación Espacial Internacional en otoño de este año, gracias al apoyo de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA).
Así lo expresó, John Olson, director del Laboratorio de Exploración de la NASA: “la llegada de R2 a la estación espacial es sólo el comienzo de una larga historia que será la exploración del espacio por parte del hombre en compañía de humanoides”.
“La colaboración entre ambos será la clave que nos permitirá ir más allá del sistema solar para llegar a lugares que seguramente todavía ni siquiera imaginamos”, continuó el ejecutivo.
El autómata será enviado por medio del trasbordador Discovery para que los ingenieros puedan empezar las pruebas de uso a gravedad cero, un paso muy importante para su estadía en el espacio exterior.
Cuando las haya superado, se unirá a una tripulación formada por otro robot, denominado “Dextre”, que construyó la agencia espacial de Canadá y que está compuesto por los dos brazos-grúa exteriores a la instalación.
Características
En palabras de GM, su alianza con la NASA intentará investigar la forma que “robots avanzados puedan trabajar en armonía con la gente, creando vehículos mejores y de mayor calidad en entornos de producción más seguros y competitivos”.
Para lograr todo ello, el diseño de R2 incluyó un torso equipado con dos brazos de gran precisión, que podrían ser interesantes “en las industrias aeroespaciales y de la automoción”, indicó la empresa.
R2 pesa 136 kilogramos cuando se sube a una báscula al nivel del mar, aunque, la falta de gravedad le afectaría tal como a las personas que viajan al espacio.