Comunicación estratégica: motor de las iniciativas de diversidad, equidad e inclusión

En el mundo empresarial, la diversidad, equidad e inclusión (DEI) se mencionan con tanta frecuencia que podrían parecer modas pasajeras. Sin embargo, lejos de ser tendencias temporales, se han vuelto pilares para una transformación profunda en la forma en que las organizaciones se conciben y operan. Incorporar estos principios a la responsabilidad social empresarial (RSE) puede apoyar la innovación al mejorar la creatividad y las habilidades para resolver problemas a través de perspectivas diversas, fortaleciendo la capacidad para adaptarse y asegurar un impacto positivo. Pero para que estas iniciativas realmente tengan impacto, es necesario que las organizaciones comuniquen sus esfuerzos de manera clara y auténtica.

En mi opinión, la diversidad, equidad e inclusión han ganado una relevancia sin precedentes debido a varios factores. Por un lado, la fuerza laboral es cada vez más diversa, por el otro, las audiencias esperan que las empresas actúen de manera ética y socialmente responsable. Además, estos valores aportan beneficios de negocio importantes, que generan resultados más sólidos. Cifras de KPMG señalan que más de 75% de las empresas a nivel global, consideran la DEI como un imperativo empresarial, y más de la mitad (59%) la ve como fundamental para el crecimiento potencial de las ganancias.

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Comunicación interna y externa para el éxito de la estrategia DEI

Para que una estrategia DEI sea completamente efectiva, debe alcanzar e involucrar a las audiencias internas y externas de la organización, lo que hace necesaria la comunicación de las acciones.

Cuando una organización comunica internamente sus esfuerzos, con claridad, demuestra su compromiso con estos valores, lo que puede traducirse en un aumento de la moral y la satisfacción laboral, ya que los colaboradores se sentirán parte de un entorno que valora sus diferencias y les ofrece igualdad de oportunidades. Además, una buena comunicación interna sobre DEI puede reducir conflictos y malentendidos, promoviendo una convivencia armoniosa y colaborativa.

Por otro lado, la comunicación externa es igualmente importante. En un mercado competitivo, las empresas no solo deben ofrecer productos y servicios de calidad, también demostrar su responsabilidad social. Los consumidores consideran, cada vez más, estos valores, al elegir con qué empresas interactuar. Contar con una estrategia para comunicar estos esfuerzos, permite a las organizaciones obtener beneficios como la mejora de la reputación ante sus partes interesadas; la atracción de talento diverso, lo que supone una ventaja competitiva; y adicionalmente, el fortalecimiento de la identidad de la marca.

Dicen por allí que todo comunica, incluso el silencio, así que las organizaciones que guardan silencio sobre sus esfuerzos DEI, corren el riesgo de ser percibidas como poco comprometidas con la creación de un ambiente laboral inclusivo y diverso.

Consejos prácticos para una comunicación efectiva de DEI

Comunicar correctamente las iniciativas de DEI, y lograr el alcance y engagement de las audiencias no es tarea fácil. A pesar de las buenas intenciones, muchas organizaciones llegan a cometen errores al comunicar sus estrategias. Uno de estos es el pinkwashing o la falsa publicidad de un compromiso con la diversidad, lo cual puede tener un efecto contraproducente, y terminar generando desconfianza y dañando la reputación de la organización.

Otro error común es la falta de autenticidad y la inconsistencia entre lo que se comunica externamente y lo que experimentan internamente los colaboradores; lo que puede llevar a críticas severas.

La experiencia me ha enseñado que, si los mensajes y discursos sobre DEI no están respaldados por un compromiso y acciones visibles, puede resultar perjudicial. Así que, quiero compartir algunos consejos que, desde mi punto de vista, necesitan ser considerados para que las organizaciones comuniquen sus acciones de diversidad, equidad e inclusión de manera adecuada y efectiva:

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• Transparencia y honestidad: Comunica de manera clara y honesta, admitiendo tanto los logros como las áreas de mejora. La comunicación debe reflejar el estado real de la organización en materia de DEI; no se trata de aparentar ser perfecto, sino de mostrar un compromiso genuino con la mejora continua. Esto muestra un compromiso real con el cambio.

• Enfócate en los resultados y muestra evidencia tangible: No basta con enumerar las iniciativas de DEI, hay que demostrar su impacto en la cultura organizacional. Mi sugerencia es acompañar las declaraciones con datos y ejemplos concretos de políticas y programas implementados.

• Comunica interna y externamente: La comunicación no debe limitarse a los colaboradores, debe ser parte integral de la estrategia de comunicación de la organización en general.

• Involucra a los colaboradores y capitaliza historias reales: Las voces de los colaboradores son esenciales para validar la autenticidad del mensaje, así que utiliza sus testimonios y experiencias para humanizar la comunicación y hacerla más creíble.

• Asegura la consistencia en la comunicación: Es importante que los mensajes internos y externos estén alineados. Lo que comuniques al exterior debe reflejar la experiencia de los colaboradores dentro de la organización. Una estrategia de comunicación 360 garantiza una comunicación consistente en todos los puntos de contacto con las audiencias, reforzando la credibilidad y fomentando la confianza en la organización. Además, asegura que todos los miembros de tu organización comprendan y compartan los mismos valores y objetivos.

Es claro que, en nuestros días, las acciones de DEI no son solo una cuestión de responsabilidad social, sino una estrategia empresarial fundamental. Y mejor aún, su comunicación efectiva es esencial para el éxito y la credibilidad de cualquier organización.

Dice una conocida frase de Isaac Newton, “la unidad es la variedad, y la variedad en la unidad es la ley suprema del universo”. Al adoptar la diversidad dentro de una estructura unificada, como lo es una organización, estaremos generando ventajas competitivas, pero también un impacto positivo tanto dentro como fuera de sus fronteras.

Nota del editor: Este texto pertenece a nuestra sección de Opinión y refleja únicamente la visión del autor, no necesariamente el punto de vista de Alto Nivel.

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Héctor M. Meza Director General de InfoSol. MBA y Consultor en Comunicación. Fue Vicepresidente en IBM México.