Gobierno desaparece a los desaparecidos: borran a 13 mil mexicanos de registro
En solo tres días, luego de la renuncia de la titular de la Comisión Nacional de Búsqueda, se recortaron las cifras de desaparecidos en el gobierno de AMLO
El pasado miércoles 23 de agosto, unas horas antes de que Karla Quintana Osuna presentara su renuncia al cargo de comisionada Nacional de Búsqueda del gobierno federal, el Registro de Personas Desaparecidas y no Localizadas (RNPDNO) reportaba que en México había 110,995 desaparecidos, de los cuales 57,138 (51.5%) correspondían a desapariciones ocurridas entre el 1 de diciembre de 2018 y el día de la dimisión de la funcionaria.
Tres días después, desaparecieron los reportes de 13,069 mexicanos que figuraban como desaparecidos en esa base de datos, pues el sábado 26 de agosto, ya solo había 44,069 personas en esa condición durante el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Rauda y eficiente, cada hora de esos tres días la actual administración desapareció a 181 desaparecidos, pues el decremento en las cifras no significa que ya se conozca el paradero de esas 13,069 personas, en realidad se trata de un acto gubernamental, ordenado por el mandatario mexicano, quien no está dispuesto a admitir que su gobierno pasará a la historia como el más cruento en materia de desapariciones desde 1962.
“Imagínense, nos comparaban y teníamos más desaparecidos que en la época de la guerra de Calderón, y lo estaban usando nuestros adversarios, (…) entonces pedí una información sobre esto y llegamos a la conclusión de que los censos no estaban actualizados”, dijo López Obrador el pasado 1 de agosto.
Sin embargo, la desactualización del registro a la que se refiere el titular del Poder Ejecutivo federal es una premisa falsa, pues la base de datos sí contenía con precisión el número de mexicanos desaparecidos y no localizados, junto con las cifras de las personas que fueron encontradas -con o sin vida- durante la gestión de la hoy excomisionada Nacional de Búsqueda.
Para Karla Quintana y sus colaboradores, el Registro de Personas Desaparecidas y no Localizadas logró fortalecerse justo en la actual administración, debido a que las listas de desaparecidos no solo se consideraban cifras, “sino seres humanos cuya ausencia lacera a sus familias y a la sociedad entera”.
Esta última frase todavía puede leerse en el preámbulo de la página de internet del RNPDNO, apartado que aún no ha sido rasurado como los reportes de desaparecidos.
Recorte y revictimización
El subsecretario de Gobernación, Alejandro Encinas, quien era el superior jerárquico de Quintana Osuna, emitió el viernes un comunicado en el que aclaró que el gobierno federal no está desapareciendo a los desaparecidos de la base de datos.
El boletín refuta un texto publicado en la revista Proceso en el que fuentes de la Comisión Nacional de Búsqueda revelaron que el subsecretario le exigió, a la ya extitular de esa institución, que buscara “la manera” de reducir el número de reportes de desaparición, porque el presidente sostiene que están “inflados” los números del Registro”.
“Ningún registro ‘se borra’ al realizar una localización. Cambia de estatus de “desaparecido o no localizado” a localizado”, enfatizó Encinasa la revista.
Esa es otra premisa falsa, pues ALTO NIVEL comprobó que la disminución de 13,069 registros de personas desaparecidas no se debe a que estas hayan sido localizadas, con o sin vida.
De hecho, si no “se borra” ningún registro, como asegura el subsecretario de Gobernación, los 13,069 mexicanos que dejaron de ser desaparecidos deberían haberse sumado a los localizados. Pero no es así, como se muestra a continuación.
El día que renunció Karla Quintana, el RNPDNO daba cuenta de 57,138 desaparecidos entre el 1 de diciembre de 2018 y el 23 de agosto de 2023, mientras que las personas localizadas (ya sea vivas o muertas), en el mismo periodo, eran 69,012 personas.
En cambio, el 26 de agosto el número de desaparecidos bajó a 44,069 personas, lo que nos da 13,069 desaparecidos menos. Pero en esta fecha, las personas localizadas son solo 67,969, lo que nos da una diferencia (lógica) de 1,043 mexicanos cuyo estatus cambió de desaparecidos a personas localizadas, ya sea con vida o sin ella.
¿Dónde están los demás desaparecidos que, en 72 horas, dejaron esa condición en la base de datos, si no figuran como localizados vivos o muertos? No puede argumentarse que se trataba de registros duplicados, porque el algoritmo de ese índice los hubiera detectado desde 2019, pues justo esa precisión del RNPDNO era uno de los éxitos de la gestión de Karla Quintana y, por ende, del actual gobierno.
En realidad, la respuesta es tautológica, y aunque suene repetitivo, esta administración -a casi un año de concluir- decidió desaparecer a los desaparecidos, revictimizándolos a estos y a sus familias, en una flagrante violación a su dignidad, principio que es el fundamento de todos los derechos humanos.
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