Elon Musk y su tren supersónico
El fundador de PayPal presentó mundo virtual un tren veloz, casi tanto como el mismísimo sonido, de bajo costo y energéticamente limpio. ¡Conócelo!
El sudafricano, Elon Musk, es un hombre inquieto. Uno pensaría que, ganando cerca de $80 millones de dólares al año, haber fundado PayPal y ser directivo actual de Tesla Motors, SpaceX y Solar City, su vida sería plena y lo suficientemente llena de ocupaciones. Pero no. Aparte de haber implementado un sistema de pagos en línea internacional y seguro, y estar detrás del primer auto eléctrico 100% funcional, Musk quiere dejar un legado más a la humanidad: el Hyperloop, un tren extremadamente veloz, casi tanto como el mismísimo sonido.
¿Cómo funcionaría?
Musk publicó desde su espacio de blog en Tesla Motors la idea completa y detallada en 57 páginas y hasta arte conceptual del Hyperloop, un tren que correría a unos 1220 kilómetros por hora, tan solo 14 por debajo de la barrera del sonido.
La idea básica es colocar una serie de 40 vagones-cápsula con capacidad para 28 personas cada uno dentro de un tubo que los desplazaría de la ciudad de Los Ángeles a San Francisco (570 km) en escasos 35 minutos.
El “truco” para lograr tal velocidad consiste en elevar lo suficiente el “tobogán” y generar baja presión en su interior, logrado que las cápsulas se deslizaran prácticamente sobre el aire, brindando de paso un viaje extremadamente cómodo a sus pasajeros.
“El Hyperloop (o algo similar) es la solución para el caso específico de dos ciudades entre las que hay mucho tráfico y que estén a menos de 1,500 kilómetros una de la otra”, dijo Musk.
“Alrededor de ese punto de inflexión, sospecho que el viaje supersónico por aire terminaría siendo más rápido y barato.
Con la altura suficiente y la geometría adecuada, el boom sónico en tierra no sería más ruidoso que las aerolíneas actuales, así que eso no es impedimento”.
Veloz, cómodo… ¡y más barato!
Tanto en términos de construcción, como mantenimiento y reparación (la alimentación se generaría mediante paneles solares), Musk informa que los costos serían mucho más bajos que en los métodos actuales de transporte ferroviario e incluso inferior a algunos desarrollos modernos.
Regresando al ejemplo SF-LA, se requerirían $6,000 millones de dólares para una línea dual (ida y vuelta), además de $1,500 MDD por las cápsulas internas; en contraste $70 mil millones que estima el estado de California para su línea de tren proyectada para crearse en el año 2029.
Por si fuera poco, y calculando detenidamente, Musk asegura que el pasaje costaría unos $20 dólares por persona, mucho menos de lo que se paga actualmente por viajar dicha distancia californiana.
¿Duraría mucho la inversión? Musk estima que con las tecnologías y materiales actuales es un concepto viable, además de tener la durabilidad para permanecer en circulación funcional por lo menos durante 100 años.
Por citar un ejemplo “local”, el tren de pasajeros que planea conectar la Ciudad de México con Querétaro costará unos $3.5 MDD, y se recorrería una distancia de 220 kilómetros en aproximadamente 1 hora.
¿Quién se anima a desarrollarlo?
Musk tiene mucho que hacer, y su equipo de trabajo también. Por eso es que comparten la idea e invitan a expertos en diversas áreas a contribuir al proyecto, denominándolo como un concepto “open source”.
Quién sabe, quizás terminen contratándote si los ayudas a determinar la forma más segura de dar vuelta en una curva o cómo realizar el ascenso y descenso de pasaje y materiales, en caso de que las distancias entre grandes ciudades comiencen a interconectarse. Eso sí, haría más viable un viaje en Hyperloop que en avión.
¿Se imaginan al Hyperloop como el futuro del transporte nacional e internacional, o nos quedamos con las formas tradicionales?
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